La árnica es una planta medicinal que contiene helenina, un analgésico y antinflamatorio natural. Es por ello que esta planta está considerada una de las mejores para aliviar el dolor y es utilizada tanto para heridas, raspones, contusiones como dolores musculares, artritis, esguinces y todo tipo de daños de la piel, los músculos y los tendones.
Otro de sus componentes principales es el timol, es un vasodilatador de los capilares que facilita el curso del riego sanguíneo. Alivia los hematomas.
El aceite esencial de árnica se obtiene de la extracción de la esencia de las flores amarillas de esta maravillosa planta, que crecen a lo largo del continente europeo y parte de Asia. De estas flores se obtiene este aceite amarillento.